Solía soñarlo. De vez en cuando, o casi siempre, extrañarlo. Me preguntaba si él se acordaría de mí como yo de él.
Y si me pensaba. ¿Porqué no me llamaba? ¿Qué será de su vida? ¿Que hubiese pasado si no se hubiera ido? ¿Si no hubiese sido como todos los hombres de mi vida?
Punto aparte. Ya está. ¿Porqué sigo rebuscando en los recovecos de mi memoria cosas que no son? Él se fue.. No me quiere. Grabateló: No-te-q u i e r e.
A pesar de todo. La sonrisa sigue latente. No puedo dejar de sonreír. No está pero me sigue dando todo eso que nunca nadie me pudo dar...
...Si algún día llegas a leer esto. Y pensabas en mí. Sabés que estoy acá.
Patética como siempre.
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